Hola a todos!
Muchos habréis pensado que me he olvidado de vosotros, pero la realidad es que he estado super ocupada en mis primeros días de mi Erasmus en Kaunas. Llevo justo una semana aquí y creo que es el momento de contaros mis primeras impresiones y cómo he pasado la semana.
Mi viaje empezó el domingo de madrugada. Estaba muy nerviosa e ilusionada por partes iguales, pero tenía un sentimiento de nostalgia al dejar por primera vez mi casa, mi familia y mi gente. Después de 3h y media conduciendo me planté en el aeropuerto de Madrid a la espera de que saliera mi vuelo. Ahí tuve la oportunidad de despedirme de mi familia y empezar lo que sería la experiencia más alucinante que he podido tener hasta ahora.
Al final llevé una maleta de mano, una maleta mediana y un neceser a modo de bolso. Y por si no fuera poco parecía una cebolla con tantas capas de ropa encima. Subí al avión y tuve la suerte de no tener sentado nadie al lado, lo que me permitió no tener que cargar con tanta ropa encima. Fueron 4 horas de vuelo en las que no pasó nada interesante, pero al aterrizar, a parte de la gran sacudida que sentí cuando tocamos tierra, estaba nevando.
Salí del aeropuerto cargada hasta arriba y muy cansada de no haber dormido en dos días dispuesta a vivir esta nueva aventura. Un tren me llevó a la estación de trenes de Vilnius (la capital de Lituania) y de ahi otro tren me llevó hasta la ciudad en la que estoy: Kaunas. He de hacer un inciso y es que aquí casi nadie sabe hablar inglés y toda la información está en lituano así que lo pasé bastante mal para localizar mi tren y llevar todas las maletas a cuestas ya que los medios de transporte públicos no están adaptados para personas con discapacidad y como podéis imaginar, levantar tanto peso escaleras arriba, escaleras abajo me dejó exhausta. La gran ventaja del transporte en este país es que con el carnet europeo del estudiante (ISIC) hay enormes descuentos y promociones, así que 1h y media de viaje me salió por menos de 5€. Un precio bastante razonable.
En mi ciudad de destino me esperaba mi mentora, que me acompañó a registrarme en la residencia y me enseñó lo básico para poder moverme por la ciudad. He de decir que entre los nervios, el cansancio y demás no tenía nada de hambre y lo único que quería era llamar a mi familia por Skype.
Ese es un resumen de mi viaje, quizás un poco turbulento y traumático para mi, pero ¡he sobrevivido!
Durante toda la semana la universidad organizó muchas actividades para ayudar a los nuevos estudiantes a adaptarnos, matricularnos en las asignaturas y conocer nuevos amigos. Así que apenas he tenido tiempo de deprimirme por no estar con mi familia.
En estos días he conocido a mucha gente, unos más simpáticos que otros pero sin duda lo mejor de esta semana ha sido conocer a tres chicas españolas que se han convertido en poco tiempo en unas amigas geniales y que seguro que lo pasaremos bien juntas. Se llaman Belén, Mercedes e Iraya y sin ellas estos días habrían sido mucho más difíciles de lo que han sido.
Como podéis imaginar, esta semana ha sido algo complicada y difícil para mi. En el siguiente post os contaré cómo es Kaunas, su gente, su comida y su clima, ya que estos dos últimos días hemos hecho bastante turismo y tengo muchas cositas que contar.
¡¡¡Hasta la próxima!!!